Agricultura como tradición
Los cultivos que mayoritariamente han sido explotados en estas tierras a lo largo de la historia, son tan dispares como la vid, la papa, el tomate, la caña de azúcar (muy importante en los siglos XV y XVI), el ñame, los aguacates, algunas hortalizas y el plátano.
Los cambios y evoluciones de los cultivos fueron sucediéndose según iban cambiando las necesidades de los mercados de exportación, es por ello que se pasara de la vida a la caña, y más tarde al plátano como cultivo principal. En torno a esta actividad agrícola se ha desarrollado también el aprovechamiento del espacio forestal, para la obtención de madera, varas, estaquilla, carbón,…
Desde el nivel del mar hasta aproximadamente los 600 m de altura, se observa una fragmentación del espacio agrícola en dos unidades, una dedicada a cultivos de secano y otra en la inferior, dedicada a cultivos de regadíos, principalmente el plátano, que va desde los 375 metros hasta la costa.
Por otro lado, el valor paisajístico y productivo de la zona agrícola es elevado, principalmente en el caso de los cultivos de plátanos y las frondosas ñameras que también crecen en tierras sauceras.